Cinco Cosas que no son Evangelismo

Por Mark Deve

Hay cinco cosas en las que nos podemos equivocar con respecto del evangelismo:

1) Imposición

Erroneamente tomamos al evangelismo como manipulación. Pero eso es lo que dice el mundo. La verdad, nosotros no intentamos imponer nuestras creencias a nadie. Bíblicamente, nosotros no podemos imponer nuestras creencias a nadie. La fuerza y la coacción no pueden traer consigo el cambio que Dios demanda. No puedes extender el Cristianismo por la fuerza. El evangelismo no es una especie de imposición intelectual.

Creer que algo es verdad y compartirlo con otros no es coacción. No nos imponemos al momento de evangelizar. Lo ofrecemos libremente a todos y no podemos ni forzamos a nadie.

2) Testimonio Personal

Un testimonio personal es algo maravilloso. La Biblia está llena de ejemplos y deberíamos testificar de la maravillosa experiencia de recibir la misericordia de Dios.

Considera Juan 9 y el hombre que había nacido ciego. Él da testimonio y ni siquiera sabía quien era Jesús. Sus palabras glorifican a Dios pero no presentan el evangelio. Eso no es evangelismo.

A menos que seas explícito acerca de Jesucristo y la cruz, entonces no es el Evangelio.


3) Acción Social / Participación Pública

Los ministerios de misericordia muestran la bondad de Dios y son buenos y apropiados para que los cristianos participen en ellos. Pero estas acciones no son de evangelismo. Pueden recomendar el evangelio a otros pero solamente si alguien les ha hablado del evangelio antes. Estos ministerios necesitan llevar el Evangelio integrado a ellos. Ayudar a otros o hacer bien nuestro trabajo, sea cual fuere, en si mismos no son evangelismo.

4) Apologética

La apologética es válida, pero tiene sus riesgos. Podrías enredarte hablando solamente de asuntos intelectuales o secundarios y jamás llegar al Evangelio.

Está bien para nosotros hablar con conocidos no creyentes sobre las preguntas que tengan pero nuestros intentos por contestarlas sin poner al evangelio como fundamento no les hace ningún bien. Jesús es quien establece la agenda para el evangelismo.

5) Los resultados del evangelismo

2 Corintios 2:15-16

" Porque para Dios somos grato olor de Cristo en los que se salvan, y en los que se pierden; a éstos ciertamente olor de muerte para muerte, y a aquéllos olor de vida para vida. Y para estas cosas, ¿quién es suficiente? " 

Nota que el mismo ministerio tiene dos efectos diferentes. Es como la parábola del sembrador: misma semilla, diferentes resultados.

Así que no podemos juzgar lo adecuado de lo que hacemos por la respuesta inmediata que obtenemos. La necesidad de resultados numéricos pone a los pastores en un estrés innecesario y malinterpreta la manera en la que Dios salva.

Debemos ejercer nuestros ministerios dandonos cuenta de que algunos de nosotros seremos como Adoniram Judson o como William Carey, quienes no tuvieron conversos hasta después de siete años de ministerio evangelístico fiel.

No dejes que el evangelio que predicas sea moldeado por las cosas que hacen que obtengas una respuesta inmediata. Predica el evangelio intentando persuadir —rogando que los que te escuchan crean— pero sabiendo que tú no puedes convertir a a las personas. Y luego deja que Dios haga con tu trabajo lo que sea su voluntad. Sólo Él puede dar vida a los muertos. El evangelio es poderoso y Dios se ha comprometido a usarnos para esparcir las buenas nuevas.

Fuente: sanosenlafe.blogspot.com.ar